NAVIDADES
2014. ADAPTANDO LAS TENDENCIAS -PUNTO Y SPORTY-
Continuamos
con mi adaptación personal de las tendencias a las celebraciones de
estas fechas. No os voy a revelar un mundo inexplorado de
alternativas, no soy la Harper's Bazaar. Y las opciones que os
planteo son las que yo me pondría, compradas en las tiendas en las
que yo compro. Por ese motivo habrá un montón de marcas que no
aparecen, es posible que abuse de algunas tiendas, pero así es mi
armario y así soy yo. Espero poder daros opciones que no se os
hubiesen ocurrido a vosotras solas.
Parece
que no ha habido ayer en esto de las tendencias, eso o que no ha
habido frío nunca a excepción de este año. El punto es lo más, y
claro si hemos sucumbido a la avalancha de abrigos de punto,
vestidos, pantalones, faldas, y los impertérritos jerséis tendremos
ganas de sacarles partido.
Para
mí el punto le da un carácter informal a los conjuntos -como le decía a
David en el post que le dediqué, la técnica del rebecón
informaliza casi lo que sea-, por lo que utilizaremos el resto de
prendas y complementos para elevarlo al estatus de glamouroso y
festivo. Vamos a ver qué nos sale.
Comenzamos
con un vestido, uno normalito, de manga larga, que para eso es de
punto, para darnos calor. Como son fiestas he escogido uno rojo, pero
uno negro o gris también nos serviría.
En
este caso yo recomendaría tacones, que sé que hay gente con mucho
glamour por el mundo que este tipo de vestidos lo llevan con zapato plano y van
tan fantásticas a cualquier sarao, sin embargo mi recomendación es
un tacón. El dorado con el rojo puede quedar demasiado navideño,
todo es cambiar los complementos en dorado por plateados y ya
estaría listo.
La chaqueta de terciopelo hay que amortizarla, así que nada mejor que
utilizarla para hacer más glamouroso un simple vestido de punto
Vestido
de punto rojo, Zara 25,95 €
Collar
hojas, Uterqüe 59 €
Guantes
leopardo, Uterqüe 69 €
|
Un
jersey liso es relativamente fácil de combinar, yo para hacerlo un
poco más emocionante me he decantado por dos jerséis un poco
distintos, uno con bordados -que ya utilicé en cómo adaptar el
terciopelo a las Navidades- y otro que a mí no me parece un jersey
por mucho que lo diga la web, pero que al tener una cremallera en la
espalda y tener bastante cuerpo nos puede sacar de bastantes apuros
en invierno.
Sporty,
deportivo chic
Parece
contradictorio ir con ropa informal -no haré alusión al chandal
pero estamos rozando esos extremos-, y a la vez poder enfrentarnos a
una cena o comida donde se requiere algo de presencia estilística.
Lo más importante es que si no te sientes cómoda con lo que llevas
descártalo. Sentada esa base, seguimos.
El
truco es el de siempre, a estas alturas no os voy a descubrir la
rueda, es muy importante lo que rodea a la prenda, y la actitud con
la que la llevemos. Por eso un vestido que puede parecer informal con
un buen bolso y un abrigo clásico se puede elevar al estatus de
“perfecto-para-la-cena-con-los-suegros”.
Para
los pantalones sporty, por no llamarlos directamente chandal, he
optado por partes de arriba en negro, y zapato plano. No me atrevería
a llevarlo con tacones, pero eso pueden ser manías mías, sin
embargo me acuerdo de Martirio cantando aquello de “con el chandal
y los tacones, arreglá pero informal” y me entran sudores fríos.
El
próximo día más, pero no mejor, no porque sea imposible, que lo
es, sino porque no me saldrá.
Hay más adaptaciones a las tendencias de este invierno
No hay comentarios:
Publicar un comentario