21 noviembre, 2018

MISSY CABALGA DE NUEVO

VOLVER O NO VOLVER, HE AHÍ LA CUESTIÓN.


Todo comenzó hace bastante tiempo, más del que quiero admitirme a mí misma, cuando decidí que iba a pintar la casa, y para tan magna actividad concentré todos los trastos habidos y por haber en el rincón donde dormita mi pobre ordenador, aquello era la zona cero del desastre, tanto que aún no se ha recuperado del todo, y es que llegar al ordenador era harto difícil, por lo que los post no llegaban, no era humanamente posible concentrarse con ese desbarajuste. El lío fue pasando pero fue sustituido por una desconexión total de las noticias fashioniles. Os aseguro que llevo dos meses -¿tanto ya? Uff es muy posible, pero prefiero no pensarlo- que no he abierto un blog de moda, una revista, ni en papel ni en digital, y es que cuando con toda mi ilusión compré el Vogue Colecciones me entró un poco de indignación.
¿Otra vez? ¿En serio?
Llevo ya unos cuantos posts sobre tendencias y pese a no ser nadie en este mundo, y que de influencer no llegue ni a influencer de mi escalera, creo que esto ya aburre un poco.
Cualquier redactor de moda se podría las manos en la cabeza, sin embargo ando ya saturada de modas que tardan tres años en volver, y por mucho que me digan que son parecidas pero no iguales me gustaría a mí que alguien le tosiese a mis pantalones de estampado de príncipe de gales de hace 7 temporadas, me los podría haber comprado hace un mes.

Jordi Labanda en colaboración con Louis Vuiton

Este desenganche virtual al mundo de la moda y la ropa me ha servido para relativizar aún más todo este circo. No sé si a vosotras os pasará sin embargo yo llegué a pensar que era urgente conseguir ese bolso de Chloé que era tan mono y que llevaba cualquier bloger/intagramer/ lo-que-sea-que-se-lleve-ahora, los blogs, las revisas, todo te dirigía a pesar que para ser alguien, para parecer que rozabas el éxito, aunque fuese de refilón, tenías, debías tener ese bolso, sudadera, zapatos, vestidos,.... cada semana variaba.
Supongo que de eso se trata el juego, por ese motivo mi propósito de año nuevo fue no comprarme nada, ni un pañuelo, ni un colgantito mono que me iría genial porque ahora se llevan muchas cadenitas finitas, ni unas chanclas para ir a la playa porque las mías son muy sosas y me viene bien tener unas de repuesto. Nada de nada, el nada absoluto.

Jordi Labanda


Estoy en la recta final, puede que la más dura, con lo que me gusta a mí un buen descuento, el black friday a la vuelta de la esquina, las compras navideñas, las promociones, ufffff hay veces que hiperventilo pensando en la prohibición, porque lo que fastidia no es no comprar en sí, es pensar que eso no puedes hacerlo. Os aseguro que pasé por las rebajas de verano sin inmutarme -me vino bien no hacer un post sobre qué comprar, así tampoco buceé mucho en las tiendas-, miro el armario y sigo sintiendo que no sé qué ponerme porque tengo demasiadas opciones -si fuese como cuando iba a la facultad no tendría tantos problemas, había un número de opciones limitadas-, y el tener más no me facilitaría la vida.

Jordi Labanda


Supongo que todo se centra en la moderación, está bien comprar de vez en cuando, pero cuando pretendes que te siga la gente, que te lean, y te fijas en la gente que ya ha triunfado que lleva un modelito cada día, que hasta las tostadas con aceite de por la mañana son dignas de una foto de instagram, sueñas con tener que vender tu armario cada tres meses, y el tener muchas cosas no es un problema, es la norma, no hace falta moderación, esa no es tu vida, tu vida es el maximalismo.
He aceptado que el blog no me dará dinero suficiente como para irme de viaje exótico, o para comprarme el bolso Lady de Dior, tampoco hubiese servido para ponerme delante de la cámara, para qué engañarnos, y lo de cambiar todo mi vestidor cada 6 meses creo que lo llevaría mal, si yo llevo los mismos vaqueros desde hace 11 años -lo calculé hace un mes y casi no me lo creía-, tengo abrigos de mi madre “cuando era soltera”, botas de una prima segunda que tendrán la friolera de 25 años, al final todo vuelve y como decía Coco Chanel “quien pretende se original es que no tiene memoria”.

Jordi Labanda


Espero poder seguir contándoos mis peripecias de una blogger de pueblo pequeño, quiero retomar el ritmo poco a poco, con un post a la semana, que espero que sean los miércoles, y poder volver al ritmo habitual en unos meses.
No puedo agradecer lo suficiente la paciencia que estáis teniendo conmigo, espero no estar abusando mucho de ella.
El próximo post ¿cómo llevar calcetines altos sin parecer una adolescente trasnochada?



4 comentarios:

  1. Missy te esperamos con ansia...tu blog es un oasis en el mundo fashionista digital. Yo seguiré aquí esperando disfrutar de tu visión d ela moda y de tu estilo.

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    1. A ritmo de tortuga pero seguiré en la resistencia con vosotras.
      Gracias por leerme aún.

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  2. ������ tengo ganas de leerlo !

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