SAG 2018, ALFOMBRA ROJA. ESO NO SE HACE NIÑA.

SAG 2018. ALFOMBRA ROJA, ESO NO SE HACE NIÑA.

Comencemos por el principio, y es que esta semana intentaré hacer los tres posts de siempre, que con esto de los premios hay un montón que despellejar, y como eso alivia mucho el estrés, y el despelleje es muy bueno para nuestro organismo, pues nada, habrá que contribuir en bajar nuestro niveles de cortisol para mantenernos relajadas y fantásticas.

Dicho esto vamos con el post de hoy, los SGA que se dieron este fin de semana, y la verdad es que no vi ningún descalabro de estos que hacen época, tipo el vestido negro brillantoso de Calvin Klein que llevó Kate Winstlet en los Oscar de 2016 y que quedará en nuestra retina, el vestido y los memes que lo comparaban con una bolsa de basura.

Los Angeles Times

En fin que hay algunos apuntes de los que podemos aprender si alguna vez nos invitan a un evento de postín donde tengamos que ir como Cenincienta al baile.

Chapa y pintura. El maquillaje de las estrellas.

Hay una corriente muy fuerte en el mundo belleza de ir maquillada como una puerta pero que no se note, y para ello, aparte de buenos productos y mucha maña, utilizan colores neutros, y mucho color carne, en labios, en sombras de ojos, vamos que parece que te has levantado así. A mí me gusta que el maquillaje, es decir, la base, no se note, que están muy bien esas fotos y esos vídeos en los que te enseñan cómo se maquillan las que saben y parecen otras al acabar el proceso, pero cuando vas a reproducirlo en casa al acercarte al espejo parece que tu cara es de gomaespuma. Ains que me disperso, bueno pues que me parece genial ir con un maquillaje que parece que no llevas nada encima, pero es que hay algunas veces que unos labios rojos mejorarían mucho el estilismo.

Holly Hunter de Paule Ka.

El vestido tiene un patrón que le sienta bien, el color no es el que más me gusta, sin embargo no puedo decir que sea un fallo garrafal, lo que no veo de ninguna de las maneras es ese peinado. A ver, yo entiendo que bastante tendrán las pobres actrices probándose vestidos y haciendo quedadas con sus estilistas para ver qué vestido ponerse en cada alfombra roja como para estar atentas a todo, que igual no habían pensado en el peinado para el evento, ains ¿hacía falta llevar la melena como cuando sales de la playa? Una coleta baja, unos labios rojos e iría la mar de mona, pero es que esa manía de ir con la cara “lavada”, hay estilismos en los que funciona, y otros en los que no.

Glamour

Holly Hunter vestida de Paul Ka

SGA 2018

Algo me chirria y no se lo que es.

Igual es algún detalle insignificante, igual es un pelo mal puesto, o una transparencia que no acaba de concordar, algo que no funciona y que hace que se tuerza el gesto a lo Miranda Presley.

Yvonne Strahoviski de Ester Abner.

A Yvonne el maquillaje de “no voy maquillada” le queda bien, y es que la chica es muy guapa, no es eso lo que le falla, ni que el vestido sea tan revelador, la verdad es que lo que creo que no funciona es el fajín satinado que lleva, es que no veo que aporte nada a la prenda. Sin embargo no nos vamos a engañar, la chica va guapa, que esto es un apunte porque necesitamos un poco de despelleje para bajar el cortisol en sangre y aliviar nuestro estrés, que no es por ella, es por nosotras :P.

Glamour

Yvonne Strahoviski vestida de Ester Abner

SGA 2018

Winona Ryder

Ya lo dije en el post sobre los Golden Globes, entiendo que las actrices lleven chaquetas y abrigos si hace frío ¡faltaría más! Que la salud es lo primero, dicho estos tengo que puntualizar que no acaba de gustarme cómo están combinando las chaquetas/toreras con los vestidos, puede que sea que me chirría que sean del mismo color, que sean chaquetas que imitan las de un traje masculino, puede que sea que mi retina no esté acostumbrada, la cuestión es que me chirría.

Vosotras ¿cómo llevaríais las chaquetas con vestido? ¿Mismo color? ¿Distinto color? ¿Masculinas? Yo no lo tengo claro, aún estoy rumiándolo.

Glamour

Winona Ryder, SGA 2018

Ese color no es para mi.

Últimamente hay un montón de actrices que visten de color carne, rosa empolvado, rosa milenial -que alguien me explique como casi cualquier rosa se ha convertido en rosa milenial independientemente de su tonalidad-, o nude, pero no a todas les queda bien. En principio si tu color de piel es muy claro es mejor evitarlo, sin embargo siempre ha habido clases, y hay mujeres a las que le queda bien, y otras que les queda como a un santo dos pistolas. Pues estamos ante esta situación.

Madeline Bewer de Reem Acra.

Reconozco que si miro el vestido sin fijarme en Madeiline me gusta, con cuerpo tipo corsé, con perlitas, falda acampanada que llega hasta los tobillos -así podemos presumir de zapatos-, ains pero si me fijo en el conjunto, uy se me ponen los pelos de punta.

Ojo que la chica no es que vaya mal, el maquillaje me gusta mucho, y las sandalias, me parece una combinación genial con el vestido, pero en otra persona. Es posible que sea la actutud de muñeca de cera que tiene en esta fotografía, no lo tengo muy claro, pero algo se me ha erizado la verla.

Glamour

Madeline Brewer vestida de Reem Acra

SGA 2018

Por otro lado hay actrices que pese a tener la piel muy clara no me chirría tanto que lleven un color que parece una prolongación de su dermis. Como ejemplo tenemos a Alison Sudol de Miu, que con esa sonrisa hace que todo armonice, y mira que el maquillaje es mejorable, lo que levanta el ánimo y el estilismo unos labios rosa fuerte, o rojo, y nada, se empeñan en llevarlos así, a lo natural, ains.

Glamour

Alison Sudol vestida de Miu Miu

SGA 2018

Otra actriz con piel casi transparente es Dakota Fanning y pese a todo, incluido un maquillaje de “no voy maquillada”, veo más armonía que en Madeline, puede que sea la actitud, que ir cómoda con lo que llevas puesto hace mucho.

Glamour

vestida de

SGA 2018

Y a la que veo impresionante, y lleva un vestido de color nude que casi se confunde con su piel, es a Marisa Tomei, y sí, este maquillaje me gusta más, con un poco de color en los labios. El vestido se adapta a su silueta, se la ve cómoda, y eso, y los brillos -lo que me gusta a mí un brillo-, hace que vaya bien. O por lo menos esos me parece a mí.

Glamour

Marisa Tomei vestida de Laura Basci

SGA 2018

El escote de mi vestido.

Simplemente hay veces que es mejor ser más discretas, hay veces que es mejor elegir otro punto focal para nuestro estilismo, simplemente hay escotes que no nos sientan bien.

Keltie Knight de Erdem.

He dudado si el fallo del vestido de Keltie era el escote, o que no favorecía a su figura, o todo junto.

No me quiero meter con ese brazo a lo maniquí de El Corte Inglés, que a este paso me reencarno en piedra, pero reconozco que no ayuda mucho a que la chica se vea favorecida en la fotografía, pero obviando ese punto, es que mi mirada va directa a su esternón, creo que con un escote igual de profundo y algo menos abierto hubiese armonizado mejor el vestido -ya sabéis personas de Erdem, contratadme a mí de asesora que los que tenéis os están tomando el pelo-.

Glamour

Keltie Knight vestida de Erdem

SGA 2018

Cuestion de silueta.

Nada, que hay veces que los estilistas se hacen un lío y acaban las pobres actrices con vestidos que no equilibran sus figuras. Aprendamos de sus errores y nos los cometamos nosotras.

Elisabeth Moss de Adam Selman

El negro es casi un valor seguro, y no se puede decir que la pobre Elisabeth vaya para crucificarla, dicho esto reconozco que hay un par de puntos que podrían mejorarse.

El vestido no acaba de adaptarse bien a su figura, de ahí la arruga de la cintura, puede que con un cinturón que marcase más la cintura, y unos centímetros más que hiciesen su silueta más longilínea se hubiese visto más favorecida. Aunque, insisto, no iba mal, iba mejorable.

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Elisabeth Moss vestida de Adam Selman

SGA 2018

Gina Rodriguez de Rosario Resort.

Confieso que me volví adicta a la serie que protagoniza Gina, Jane the virgin, es un culebrón en toda regla, pero me hacía reír tanto, es una pena que la dejasen de emitir en abierto, tendré que buscarla por las ondas cibernéticas y volver a engancharme.

Vamos por partes, lo bueno del estilismo, pues el maquillaje, la actitud, y el estampado, que siempre anima un buen estampado.

Los puntos flojos, esos hombros. Mujeres del mundo, dejad de contorsionar los hombros hacia delante que eso es fatal para la espalda, y además parece que nos estamos avergonzando de algo, que nos hacemos pequeñitas, la espalda siempre recta y los hombros hacia atrás.

Y el otro punto débil son las cazuelas del vestido, para mi gusto cobran demasiado protagonismo, me hubiese gustado más el vestido si hubiesen sido del mismo estampado que el resto del vestido, ribeteadas de negro perfecto, pero no todas negras.

Glamour

Gina Rodriguez vestida de Rosario Resort

SGA 2018

Allison Williams de Ralph & Russo Couture.

El vestido es bonito, pero me parece que ese escote tan rígido favorece a poca gente, y es que abre la silueta en los hombros y hace que parezcamos nadadoras profesionales. Creo que si este mismo vestido se hubiese ajustado más al pecho, vamos un vestido palabra de honor de toda la vida, la silueta no se vería tan descompensada.

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Allison Williams vestida de Ralph & Russo Couture

SGA 2018

Hasta aquí el despelleje de hoy, mañana los premios Feroz. No sé si mi karma sobrevivirá a esta época de premios, ya voy por piedra ¿qué hay más bajo que eso en las reencarnaciones?